El presidente Jimmy Carter cancela el desarrollo de la bomba de neutrones.

Una bomba de neutrones, definida oficialmente como un tipo de arma de radiación mejorada (ERW), es un arma termonuclear de bajo rendimiento diseñada para maximizar la radiación de neutrones letales en las inmediaciones de la explosión y minimizar el poder físico de la explosión en sí. Se permite intencionalmente que la liberación de neutrones generada por una reacción de fusión nuclear escape del arma, en lugar de ser absorbida por sus otros componentes. El estallido de neutrones, que se utiliza como la principal acción destructiva de la ojiva, puede penetrar la armadura enemiga con más eficacia que una ojiva convencional, lo que la hace más letal como arma táctica.

El concepto fue desarrollado originalmente por los EE. UU. a fines de la década de 1950 y principios de la de 1960. Fue visto como una bomba "limpia" para usar contra divisiones blindadas soviéticas masivas. Como estos se usarían sobre naciones aliadas, en particular Alemania Occidental, el daño por explosión reducido se consideró una ventaja importante. Los ERW se desplegaron operativamente por primera vez para misiles antibalísticos (ABM). En este papel, el estallido de neutrones provocaría una fisión parcial de las ojivas nucleares cercanas, lo que evitaría que explotaran correctamente. Para que esto funcione, el ABM tendría que explotar dentro de aproximadamente 100 metros (300 pies) de su objetivo. El primer ejemplo de un sistema de este tipo fue el W66, utilizado en el misil Sprint utilizado en el sistema Nike-X de EE. UU. Se cree que el equivalente soviético, el misil 53T6 del A-135, utiliza un diseño similar. El arma fue propuesta una vez más por EE. UU. para uso táctico en las décadas de 1970 y 1980, y la producción del W70 comenzó para el MGM-52 Lance en 1981. Esta vez provocó protestas a medida que el creciente movimiento antinuclear ganaba fuerza durante este período. La oposición fue tan intensa que los líderes europeos se negaron a aceptarla en su territorio. El presidente Ronald Reagan ordenó la producción del W70-3, que permaneció almacenado en EE. UU. hasta que se retiró en 1992. El último W70 se desmanteló en 2011.