Se abre la Conferencia de Ginebra sobre el conflicto árabe-israelí.
La Conferencia de Ginebra de 1973 fue un intento de negociar una solución al conflicto árabe-israelí según lo previsto en la Resolución 338 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas tras el alto el fuego solicitado para poner fin a la Guerra de Yom Kippur. Después de considerables negociaciones de "diplomacia itinerante" por parte de Henry Kissinger, la conferencia se inauguró el 21 de diciembre de 1973 bajo los auspicios del Secretario General de las Naciones Unidas, con Estados Unidos y la URSS como copresidentes. Asistieron los ministros de Relaciones Exteriores de Egipto, Jordania e Israel. La mesa con la placa con el nombre de Siria permaneció desocupada, aunque Siria había indicado una posible participación futura. Cada ministro de Relaciones Exteriores habló, principalmente dirigido a sus audiencias nacionales en lugar de entre sí. Kissinger articuló su estrategia paso a paso y afirmó que el objetivo de la conferencia era la paz; la necesidad inmediata era fortalecer el alto el fuego logrando una retirada de fuerzas como el "primer paso esencial" hacia la implementación de la ONU 242. Luego se levantó la reunión. Aunque no se llegó a un acuerdo en Ginebra, el esfuerzo no fue en vano. Después de las elecciones israelíes, el 18 de enero de 1974 se firmó una separación militar entre Israel y Egipto, y el 31 de mayo se firmó una separación entre Israel y Siria.
Aunque fracasaron los intentos de revivir la Conferencia en años posteriores, el Acuerdo Provisional de Sinaí entre Israel y Egipto se firmó formalmente en Ginebra el 4 de septiembre de 1975, como parte del proceso de la Conferencia de Ginebra. Este acuerdo establecía que los conflictos entre Egipto e Israel "no se resolverán por la fuerza militar sino por medios pacíficos".