Trescientas sesenta personas mueren en un incendio en una prisión hondureña en la ciudad de Comayagua.
El incendio de la prisión de Comayagua, o conocido localmente en Comayagua como la Prisión del Infierno, fue un incendio mortal que ocurrió del 14 al 15 de febrero de 2012 en la Penitenciaría Nacional de Comayagua, Honduras, y mató a 361 personas. Los presos atrapados en sus celdas morían quemados o asfixiados; docenas fueron quemadas más allá del reconocimiento. El fuego comenzó tarde en la noche del 14 de febrero. Según un preso, las llamadas de ayuda salieron casi de inmediato y "durante un rato nadie escuchó. Pero después de unos minutos, que parecieron una eternidad, apareció un guardia con llaves y nos dejó salir". Las fuerzas de rescate no llegaron hasta unos 40 minutos después. Con un número de muertos de 361, este es el incendio carcelario más mortífero jamás registrado.