El vuelo 663 de Eastern Air Lines se estrella en el Océano Atlántico y explota, matando a todos a bordo.

El vuelo 663 de Eastern Air Lines era un vuelo doméstico de pasajeros desde Boston, Massachusetts, a Atlanta, Georgia, con escalas programadas en el Aeropuerto Internacional John F. Kennedy, Nueva York; Richmond, Virginia; Charlotte, Carolina del Norte; y Greenville, Carolina del Sur. En la noche del 8 de febrero de 1965, el avión que realizaba el vuelo, un Douglas DC-7, se estrelló cerca de Jones Beach State Park, Nueva York, justo después de despegar del aeropuerto JFK. Los 79 pasajeros y cinco tripulantes a bordo fallecieron.

La investigación de la Junta de Aeronáutica Civil (CAB) determinó que las maniobras evasivas realizadas por el vuelo 663 para evitar un Boeing 707 de Pan Am que se aproximaba provocaron que el piloto sufriera desorientación espacial y perdiera el control de la aeronave. El accidente es el tercer peor accidente que involucra a un DC-7.