Al menos 120 personas mueren y 130 resultan heridas por un atentado suicida en la provincia de Diyala, Irak.
El 17 de julio de 2015 se produjo un atentado suicida con coche bomba en la ciudad iraquí de Khan Bani Saad, cuyo objetivo era un mercado local. Al 19 de julio de 2015, aproximadamente 130 personas murieron en el bombardeo, con un número similar de heridos. Varias personas murieron por el derrumbe de edificios. La bomba se escondió debajo de un camión de hielo en un intento de atraer a más personas en medio del calor. La responsabilidad del ataque fue reivindicada por el Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIL).