Un avión de pasajeros de Transcontinental & Western Air se estrella cerca de Bazaar, Kansas, matando a ocho, incluido el entrenador en jefe de fútbol de la Universidad de Notre Dame, Knute Rockne.
El 31 de marzo de 1931, un Fokker F-10 perteneciente a Transcontinental and Western Air se estrelló cerca de Bazaar, Kansas después de despegar del Aeropuerto Municipal de Kansas City, Kansas City, Missouri.
El vuelo programado era de Kansas City a Los Ángeles, con escala en Wichita. En este primer tramo, la estructura de madera de un ala falló, lo que provocó que el avión se estrellara y las ocho personas a bordo murieron, incluido el entrenador de fútbol de Notre Dame, Knute Rockne. La investigación descubrió que el ala de madera se humedeció con el tiempo, lo que provocó que el pegamento que conecta el ala al cuerpo se debilite, permitiendo que el ala se separe. El accidente provocó cambios significativos en la seguridad de los aviones, la industria aeronáutica y tuvo un significado cultural debido a la muerte de Rockne y la percepción pública de la seguridad de los aviones.