La Constitución del 3 de mayo (la primera constitución moderna en Europa) es proclamada por el Sejm de la Commonwealth polaco-lituana.
La Constitución del 3 de mayo de 1791, titulada Ley de Gobernanza, fue una constitución adoptada por el Gran Sejm ("Sejm de cuatro años", reunido en 1788-1792) para la Commonwealth polaco-lituana, una monarquía dual que comprende la Corona del Reino. de Polonia y el Gran Ducado de Lituania. La Constitución fue diseñada para corregir los defectos políticos de la Commonwealth. Había estado precedido por un período de agitación e introducción gradual de reformas, comenzando con la Convocatoria Sejm de 1764 y la elección subsiguiente ese año de Stanisław August Poniatowski, el último rey de la Commonwealth.
La Constitución buscó implementar una monarquía constitucional más efectiva, introdujo la igualdad política entre la gente del pueblo y la nobleza, y colocó a los campesinos bajo la protección del gobierno, mitigando los peores abusos de la servidumbre. Prohibió instituciones parlamentarias perniciosas como el liberum veto, que había puesto al Sejm a merced de un solo diputado, que podía vetar y deshacer así toda la legislación adoptada por ese Sejm. Los vecinos de la Commonwealth reaccionaron con hostilidad a la adopción de la Constitución. El rey Federico Guillermo II rompió la alianza de Prusia con la Commonwealth polaco-lituana. Se unió a la Rusia Imperial de Catalina la Grande y la Confederación Targowica de magnates polacos antirreformistas para derrotar a la Commonwealth en la guerra polaco-rusa de 1792.
La Constitución de 1791 estuvo en vigor menos de 19 meses. Fue declarado nulo y sin efecto por el Grodno Sejm que se reunió en 1793, aunque el poder legal del Sejm para hacerlo era cuestionable. La Segunda y Tercera Partición de Polonia (1793, 1795) finalmente terminaron con la existencia soberana de Polonia hasta el final de la Primera Guerra Mundial en 1918. Durante esos 123 años, la Constitución de 1791 ayudó a mantener vivas las aspiraciones polacas para la eventual restauración de la soberanía del país. En palabras de dos de sus principales autores, Ignacy Potocki y Hugo Kołłątaj, la Constitución de 1791 fue "la última voluntad y testamento de la Patria que expira". La Constitución del 3 de mayo de 1791 combinó una república monárquica con una clara división del poder ejecutivo, y poderes judiciales. En general, se considera la primera constitución nacional escrita moderna de Europa y la segunda del mundo, después de la Constitución de los Estados Unidos que entró en vigor en 1789.