La colisión de trenes de Chatsworth en 2008 en Los Ángeles entre un tren de cercanías de Metrolink y un tren de carga de Union Pacific mata a 25 personas.
La colisión de trenes de Chatsworth en 2008 ocurrió a las 4:22:23 p. m. PDT (23:22:23 UTC) del viernes 12 de septiembre de 2008, cuando un tren de carga de Union Pacific y un tren de cercanías de Metrolink chocaron de frente en el barrio de Chatsworth de Los Ángeles, California, Estados Unidos.
La escena del accidente fue una sección curva de vía única en la Línea del Condado de Ventura de Metrolink, justo al este de Stoney Point. Según la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB, por sus siglas en inglés), que investigó la causa de la colisión, el tren de Metrolink pasó una señal roja antes de ingresar a una sección de vía única donde el despachador de trenes le había dado el derecho de paso al tren de carga contrario. . La NTSB culpó al ingeniero del tren Metrolink, Robert M. Sanchez, de 46 años, por la colisión y concluyó que se distrajo con los mensajes de texto que enviaba mientras estaba de servicio.
Este evento de víctimas masivas provocó una respuesta de emergencia masiva tanto por parte de la ciudad como del condado de Los Ángeles, pero la naturaleza y el alcance del trauma físico pusieron a prueba los recursos disponibles. El primer oficial que respondió, Tom Gustofson, describió el naufragio como "más allá de la descripción humana". La respuesta incluyó búsqueda y rescate de patrulla móvil de emergencia de California (CEMP) como una unidad de primera respuesta solicitada por el Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD). Con veinticinco muertes, este se convirtió en el accidente más mortal en la historia de Metrolink. Muchos sobrevivientes permanecieron hospitalizados durante un período prolongado.
Los abogados rápidamente comenzaron a presentar demandas contra Metrolink y, en total, se espera que excedan un límite de responsabilidad de US$200 millones establecido en 1997, presagiando los primeros desafíos legales a esa ley. Los problemas relacionados con este accidente también han iniciado y revitalizado el debate público sobre una variedad de temas, incluidas las relaciones públicas, la gestión de emergencias y la seguridad, lo que también ha resultado en acciones regulatorias y legislativas, incluida la Ley de mejora de la seguridad ferroviaria de 2008.