Batalla de Curupayty en la Guerra del Paraguay.
La Batalla de Curupayty fue una batalla clave en la Guerra de Paraguay. En la mañana del 22 de septiembre de 1866, la fuerza conjunta de los ejércitos brasileño, argentino y uruguayo atacó las trincheras fortificadas paraguayas en Curupaity. Los paraguayos estaban dirigidos por el general José E. Díaz. Esta posición estaba ocupada por 5.000 hombres y 49 cañones, algunos de ellos en lugares ocultos fuera de la vista de los atacantes. La Armada de Brasil apoyó a los 20.000 asaltantes, pero los barcos tuvieron que mantener cierta distancia de los cañones en la fortaleza de Humaitá, lo que provocó la falta de precisión y el impacto del fuego del barco. El fracaso de la armada fue crucial en el resultado posterior de la batalla terrestre: 61–62 Los paraguayos también lograron engañar a sus enemigos: una trinchera atrajo la mayor parte del fuego brasileño, pero las tropas paraguayas estaban ubicadas en otro lugar. Se perdió alrededor del 20 por ciento de las casi 20.000 tropas aliadas (brasileñas y argentinas) involucradas en el ataque; Paraguay perdió menos de cien hombres. El fracaso total resultó en el cambio del mando aliado. El mayor éxito de Paraguay en la guerra finalmente desastrosa fue limitado porque su líder militar, Francisco Solano López, no contraatacó a los aliados derrotados; ni siquiera un general tan célebre como Díaz atacaría sin las órdenes de López. En última instancia, la batalla de Curupayty fue simplemente una nota al margen y un éxito temporal en lo que eventualmente se convertiría en un casi exterminio del pueblo paraguayo.