Revolución Cubana: Fulgencio Batista bombardea la revuelta en Cienfuegos.
Fulgencio Batista y Zaldvar (; español: [fulxensjo atista i saldia]; nacido Rubn Zaldvar, 16 de enero de 1901 6 de agosto de 1973) fue un militar y político cubano que se desempeñó como presidente electo de Cuba desde 1940 hasta 1944 y como su Dictador militar respaldado por Estados Unidos desde 1952 hasta 1959, cuando fue derrocado por la Revolución Cubana.
Batista inicialmente subió al poder como parte de la Revuelta de los Sargentos de 1933, que derrocó al gobierno provisional de Carlos Manuel de Cspedes y Quesada. Batista luego se nombró a sí mismo jefe de las fuerzas armadas, con el rango de coronel, y controló efectivamente la "pentarquía" de cinco miembros que funcionaba como el jefe de estado colectivo. Mantuvo el control a través de una serie de presidentes títeres hasta 1940, cuando fue elegido presidente con una plataforma populista. Luego instauró la Constitución de Cuba de 1940 y sirvió hasta 1944. Después de terminar su mandato, Batista se mudó a Florida y regresó a Cuba para postularse para presidente en 1952. Ante una derrota electoral segura, lideró un golpe militar contra el presidente Carlos Pro Socarrs que pre -vació la elección. De vuelta en el poder y recibiendo apoyo financiero, militar y logístico del gobierno de los Estados Unidos, Batista suspendió la Constitución de 1940 y revocó la mayoría de las libertades políticas, incluido el derecho a la huelga. Luego se alineó con los terratenientes más ricos que poseían las plantaciones de azúcar más grandes y presidió una economía floreciente que disminuyó la brecha entre cubanos ricos y pobres. Eventualmente llegó al punto en que la mayor parte de la industria azucarera estaba en manos estadounidenses y los extranjeros poseían el 70% de la tierra cultivable. Como tal, el gobierno represivo de Batista comenzó entonces a beneficiarse sistemáticamente de la explotación de los intereses comerciales de Cuba, negociando relaciones lucrativas tanto con la mafia estadounidense, que controlaba los negocios de drogas, apuestas y prostitución en La Habana, como con grandes empresas multinacionales con sede en Estados Unidos. quienes obtuvieron lucrativos contratos. Para sofocar el creciente descontento entre la población, que posteriormente se mostró a través de frecuentes disturbios y manifestaciones estudiantiles, Batista estableció una censura más estricta de los medios de comunicación, al mismo tiempo que utilizaba la policía secreta de su Oficina para la Represión de las Actividades Comunistas para llevar a cabo violencia a gran escala, tortura y ejecuciones públicas. Estos asesinatos aumentaron en 1957, cuando las ideas socialistas se volvieron más influyentes. Muchas personas murieron, con estimaciones que van desde cientos hasta unas 20.000 personas muertas. Estas tácticas finalmente no lograron sofocar los disturbios y, en cambio, fueron el catalizador de una resistencia más generalizada. Durante dos años (diciembre de 1956 a diciembre de 1958), el Movimiento 26 de Julio de Fidel Castro y otros elementos rebeldes encabezaron un levantamiento guerrillero urbano y rural contra el gobierno de Batista, que culminó con su eventual derrota ante los rebeldes bajo el mando del Che Guevara en la Batalla de Santa Clara el día de Año Nuevo de 1959. Batista huyó inmediatamente de la isla con una fortuna personal amasada a la República Dominicana, donde el hombre fuerte y anterior aliado militar Rafael Trujillo tenía el poder. Batista finalmente encontró asilo político en el Portugal de Oliveira Salazar, donde primero vivió en la isla de Madeira y luego en Estoril. Tenía actividades comerciales en España y se alojaba allí en Guadalmina en el momento de su muerte por un infarto el 6 de agosto de 1973.
La Revolución Cubana ( español : Revolución cubana ) fue una revuelta armada dirigida por Fidel Castro y sus compañeros revolucionarios del Movimiento 26 de julio y sus aliados contra la dictadura militar del presidente cubano Fulgencio Batista . La revolución comenzó en julio de 1953 y continuó esporádicamente hasta que los rebeldes finalmente derrocaron a Batista el 31 de diciembre de 1958, reemplazando su gobierno. El 26 de julio de 1953 se celebra en Cuba como Día de la Revolución (del español: "Día de la Revolución"). Posteriormente, el Movimiento 26 de Julio se reformó siguiendo líneas marxista-leninistas, convirtiéndose en el Partido Comunista de Cuba en octubre de 1965. La Revolución Cubana tuvo poderosas repercusiones nacionales e internacionales. En particular, transformó las relaciones Cuba-Estados Unidos, aunque los esfuerzos para mejorar las relaciones diplomáticas, como el deshielo cubano, cobraron impulso durante la década de 2010. Inmediatamente después de la revolución, el gobierno de Castro inició un programa de nacionalización, centralización de la prensa y consolidación política que transformó la economía y la sociedad civil de Cuba. La revolución también anunció una era de internacionalismo médico cubano e intervención cubana en conflictos extranjeros en África, América Latina, el sudeste asiático y el Medio Oriente. Varias rebeliones ocurrieron en los seis años posteriores a 1959, principalmente en las montañas del Escambray, las cuales fueron derrotadas por el gobierno revolucionario.