El atentado con bomba del metro de Minsk de 2011 tuvo lugar el 11 de abril de 2011 cuando 15 personas murieron y 204 resultaron heridas cuando una bomba explotó dentro del metro de Minsk, Bielorrusia. La explosión ocurrió en la estación central de Kastryčnickaja a las 17:55 hora local. Inicialmente, la causa de la explosión no estaba clara, pero se descubrió que había sido una bomba. La Fiscalía abrió una investigación criminal y calificó el hecho como un ataque terrorista. Dos sospechosos arrestados el 13 de abril confesaron el atentado, pero los motivos siguen sin estar claros. En marzo de 2012, ambos perpetradores, Dzmitry Kanavalau y Vlad Kavalyov, fueron ejecutados a tiros. Ha habido un debate considerable sobre la posibilidad de que el propio gobierno bielorruso estuviera detrás del atentado. La declaración del Consejo de Seguridad de la ONU que condena el atentado se refiere al "aparente ataque terrorista". El juicio atrajo la condena política internacional y los veredictos emitidos han sido cuestionados, principalmente por la oposición bielorrusa y la UE. El atentado se produjo en un momento de grave crisis económica y protestas contra el gobierno del presidente Alexander Lukashenko.