El disturbio de Broad Street fue una pelea masiva que ocurrió en Boston, Massachusetts, el 11 de junio de 1837, entre irlandeses estadounidenses y bomberos yanquis. Se estima que 800 personas participaron en la lucha real, con al menos 10.000 espectadores incitándolos. Las casas cercanas fueron saqueadas y destrozadas, y los ocupantes fueron golpeados. Muchos en ambos lados resultaron gravemente heridos, pero no hubo muertes inmediatas como resultado de la violencia. Después de rugir durante horas, el motín fue sofocado cuando el alcalde Samuel Eliot llamó a la milicia estatal.

A raíz de los disturbios, se establecieron los departamentos de policía y bomberos de Boston.