Los secuestros de Ariel Castro ocurrieron entre 2002 y 2004, cuando Ariel Castro secuestró a Michelle Knight, Amanda Berry y Georgina "Gina" DeJesus y las mantuvo cautivas en su casa en el barrio Tremont de Cleveland, Ohio, Estados Unidos. Las tres niñas estuvieron encarceladas hasta el 6 de mayo de 2013, cuando Berry escapó con su hija de seis años, a quien había dado a luz mientras estaba en prisión, y se puso en contacto con la policía. La policía rescató a Knight y DeJesus y arrestó a Castro en cuestión de horas.

El 8 de mayo de 2013, Castro fue acusado de cuatro cargos de secuestro y tres cargos de violación. Se declaró culpable de 937 cargos penales de violación, secuestro y homicidio agravado como parte de un acuerdo con la fiscalía. Fue condenado a cadena perpetua más 1.000 años de prisión sin posibilidad de libertad condicional. El 3 de septiembre de 2013, un mes después de su sentencia, Castro se suicidó, ahorcándose con sábanas en su celda de la prisión.