El Escorial, o el Real Sitio de San Lorenzo de El Escorial (en español: Monasterio y Sitio de El Escorial en Madrid), o Monasterio del Escorial (pronunciación en español: [el eskoˈɾjal]), es una residencia histórica del Rey de España ubicada en la ciudad de San Lorenzo de El Escorial, a 2,06 km (1,28 millas) valle arriba (4,1 km [2,5 millas] de distancia por carretera) de la ciudad de El Escorial ya unos 45 kilómetros (28 millas) al noroeste de la capital española, Madrid. Construido entre 1563 y 1584 por orden del rey Felipe II (que reinó entre 1556 y 1598), El Escorial es el edificio renacentista más grande del mundo. Es uno de los sitios reales españoles y funciona como monasterio, basílica, palacio real, panteón, biblioteca, museo, universidad, escuela y hospital.
El Escorial está formado por dos conjuntos arquitectónicos de gran importancia histórica y cultural: el propio Real Monasterio y La Granjilla de La Fresneda, pabellón de caza real y retiro monástico a unos 5 kilómetros. Estos sitios tienen una doble naturaleza: durante los siglos XVI y XVII fueron lugares en los que el poder de la monarquía española y el predominio eclesiástico de la religión católica romana en España encontraron una manifestación arquitectónica común. El Escorial fue a la vez un palacio real español y un monasterio, aunque Felipe II es el único monarca que vivió en el edificio principal. Establecido con una comunidad de monjes Jerónimos, se ha convertido en un monasterio de la Orden de San Agustín. También fue internado: el Real Colegio de Alfonso XII. Felipe II contrató al arquitecto español Juan Bautista de Toledo para que fuera su colaborador en la construcción del conjunto de El Escorial. Toledo había pasado la mayor parte de su carrera en Roma, donde había trabajado en la basílica de San Pedro, y en Nápoles al servicio del virrey del rey, cuya recomendación lo llamó la atención del rey. Felipe lo nombró arquitecto real en 1559, y juntos diseñaron El Escorial como un monumento al papel de España como centro del mundo cristiano. El 2 de noviembre de 1984, la UNESCO declaró el Real Sitio de San Lorenzo de El Escorial Patrimonio de la Humanidad. Es una atracción turística popular, a menudo visitada por excursionistas de Madrid: más de 500,000 visitantes vienen a El Escorial cada año.